martes, 28 de diciembre de 2010

feliz año nuevo amigos.

Cada 31 de diciembre toca pensar en los propósitos del año que casi estamos tocando con la punta de los dedos. Solemos decir que por fin iremos al gimnasio más de dos días, que seremos fieles, que buscaremos con todas nuestras fuerzas trabajo, que estudiaremos, que seremos más buenos que el año pasado, que seremos nuevas personas, que nuestros proyectos saldrán adelante, que llegaremos a ser presidente, que besaremos a Brad Pitt si eres mujer o a Sara Carbonero si eres hombre y muchas más cosas que se nos ocurren mientras comemos las uvas. Sin embargo, nos encontramos ya en junio y vemos que ninguno o puede que uno de nuestros propósitos se han cumplido y llega otra vez esa sensación de "otro año perdido, me he mentido a mi mismo". Mi primer consejo es: ningún año se echa a perder, si lo has vivido con las personas que quieres y te importan. El segundo es: no prometas cosas que sabes que no vas a cumplir, porque al fin y al cabo, el que sale perdiendo eres tu. Cada año es una oportunidad nueva de volver a empezar, o de cambiar aquellas cosas que no te gustaron del anterior. Por lo tanto disfruta de esta despedida, pero disfruta aún más de lo que tienes por delante.

Cmz.

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